Cuesta Arriba

La ciudad se puede convertir en una pared insalvable

“directos al corazón1”

La persona con discapacidad, como cada día, se apoya en la cuidadora para bajar de la silla e intentar dar algunos pasos en plena calle. El modo con que se buscan las manos ambas personas retratan la humanidad de la escena.

“directos al corazón3”

Tras el enorme esfuerzo de la persona con discapacidad por intentar dar algunos pasos, ahora toca volver a la silla. El abrazo con su cuidadora corta la respiración…

A Canasta

partido de baloncesto en silla de ruedas